Me gusta hablar del buen trato, pues
creo que somos lo que trabajamos al largo de nuestra vida.
El amor y cariño son lecciones
importantes que no te enseñan en la escuela, no se practica el querer, poco se
trabajan las emociones y sentimientos; esto nace de uno mismo y de las personas
que nos rodean.
No perdamos la oportunidad de tratar
bien a alguien, sea o no conocido. A mí personalmente me llena saber que he
ayudado, apoyado o hecho feliz (aunque sea solo un instante) a alguien.
No paso por un buen momento de
estabilidad emocional, así que no espero más que un beso, una caricia o un
abrazo que me diga
–¡Eh, estoy contigo!
Así que con los demás me comporto como
quisiera que me trataran a mí, bien.
Tratar bien es el calor de alguien, que
te saquen una sonrisa cuando te cuesta hacerlo, aconsejarte cuando no sepas qué
hacer o poder desahogarte cuando lo necesites.
¿Por qué no dar un abrazo sin razón
alguna, o un beso porque sí?
¿Por qué está raro recordarle a alguien que le
quieres?
Siempre tiene que haber una razón para tratar
bien a alguien y eso, no tendría que ser así.
Hagamos del mundo algo bonito, y un
lugar donde ser feliz, que lo malo y los problemas están ya demasiado vistos.Marta 19 años
