Hoy
yo, Dora Sagristà Garcia tras casi cinco meses finalizo las prácticas en el
aula hospitalaria del Hospital Arnau de Vilanova.
Y
para despedirme he querido hacer mi ultima publicación en este blog, no se cual
será la reacción de los demás, ni si tampoco es muy adecuado hacerlo, pero
dicen que hay personas que actúan por impulsos y yo soy una de ellas...
El
primer día que entre en el hospital estaba muy nerviosa, no sabia si sabría
actuar correctamente, si las practicas de educación infantil serian muy adecuadas
allí, ni si iba a aprender demasiado… Por lo visto todo fue diferente de lo que
me pensé: actúe correctamente porque allí a los dos días ya aprendí a actuar
con el corazón, las practicas fueron las mejores que podría haber hecho, me
enamore de mil niños (especialmente de uno que me enseño a apreciar mas la
vida, pues aún no tenerlo fácil es de las personas mas positivas que he
conocido) y quise darles todo mi amor mas de una vez, aprendí más que en casi
toda mi vida y ya no por las compañeras, compañeros o por mi gran amiga/maestra
de practicas: Toñy, si no que también por los niños y las niñas, como siempre
he dicho “ por nuestros pequeños héroes, el futuro de esta sociedad”.
Había
escuchado hablar antes de entrar en el aula sobre ella del y algunas veces
había escuchado oír decir que allí solo se iba a pintar, por todos los que
dijeron esto os equivocasteis, hay mucho trabajo (actualizar blog, buscar
nuevas actividades, tenerlo todo siempre el máximo de bonito para que los niños
y niñas estén a gusto…)y muchas personas detrás de esta escuela, personas a las
que les estoy muy agradecida por todo lo que hacen para estos pequeños gigantes.
Hay
un mago que viene cada semana a actuar con el corazón sin esperar nada a cambio
simplemente porque le gusta robar sonrisas a través de la magia a aquellos que están
pasando un mal momento, hay un chico que cada vez que hay un debut de diabetes
va allí a escuchar y a ofrecer ayuda altruistamente, hay una mujer experta en música
clásica que va allí a enseñarles lo que ella tanto ama, a compartir todos sus
conocimientos para que los demás puedan ver algún día lo que ella ve: arte,
sentimientos y emociones detrás de una melodía, hay unas chicas (compañeras,
amigas) que las quiero muchísimo que están allí de practicas como yo lo he
estado y que cada día tienen el corazón mas lleno y que a mi me lo han llenado
muchísimo, hay una gran maestra que siempre esta intentando buscar maneras para
ayudar a los demás y de la cual he aprendido muchísimo, después hay miles de
voluntarios que van allí a hacer actividades a los más pequeños, a ayudarlos, a
hacer de su mal trago un trago mejor…
Después
fuera del aula hospitalaria hay muchas otras personas que trabajan para el bien
común de todos los niños y niñas: enfermeras que los cuidan, payasos que van
allí a hacerles reír y transmitirles positividad de forma altruista, médicos
que buscan soluciones por su salud, mujeres de limpieza que transmiten alegría
a la planta y que se ocupan de dejarlo todo limpio para que los niños puedan
estar en un lugar mas limpio y mejor, informáticos que arreglan los ordenadores
para que los niños puedan jugar o hablar con sus compañeros, seguratas que
hacen del hospital un lugar más seguro, voluntarios de “La Caixa” que están allí
cada día para ofrecer juguetes y buenos ratos, etc…
Nunca
habría dicho que había tanta gente en un hospital buscando el bien, ni el
esfuerzo que hacen… Normalmente los mayores hacemos que los niños cojan miedo a
los que llevan bata blanca y aquí es donde nos equivocamos porque lo que tendríamos
que hacer es el contrario tendríamos que enseñarles a amarlos pues están allí
para el bien, por su salud, por su seguridad… y no para el mal...
Finalmente
quiero agradecer a todos estos el trabajo que hacen cada día, el esfuerzo que
empeñan, y decirles que me voy con el corazón lleno, hacia otra lugar a
intentar aplicar alguna de todas las cosas que he aprendido, que les deseo lo
mejor y que espero que ellos puedan ver lo que yo veo: unas personas geniales.
Gracias
a todos vosotros, y a todos los que estáis leyendo esto, por todo esto y mas,
nunca olvidéis que los sueños se hacen a mano y sin pedir permiso, jamás
olvidare esta experiencia!
Otra
vez: Gracias y hasta la próxima!
Qué bonitas palabra, Dora. Gracias por dedicar tu tiempo a explicarnos toda tu experiencia y el día a día de un Hospital con niños.
ResponderEliminarNo nos acordammos de lo importante que es la salud hasta que nos pasa algo a nosotros o a alguno de los nuestros, y no deberíamos nunca de lo que les pasa a los demás y de las cosas que se pueden hacer. Te felicito y te animo a seguir...estás llena de amor y ilusión. Suerte!
Gracias Luisa!
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